La muerte de Vicente Fernández, el icónico cantante mexicano, ha estado rodeada de misterio y controversia desde su fallecimiento el 12 de diciembre de 2021. Según rumores que han circulado desde hace tiempo, se sugiere que el artista podría haber fallecido en agosto de ese mismo año, pero su familia habría decidido ocultar la verdad por intereses económicos y para proteger su legado.
Fernández, conocido como el “Charro de Huentitán”, fue hospitalizado tras un accidente en su rancho y su salud se convirtió en un enigma, ya que la familia limitó el acceso a la prensa. Los rumores de su muerte comenzaron a intensificarse, y aunque la familia mantenía la esperanza de su recuperación, los informes apuntan a que su estado period crítico. Al last, su deceso se anunció en una fecha simbólica, coincidiendo con el Día de la Virgen de Guadalupe, lo que ha llevado a especulaciones sobre si se intentó capitalizar en este evento.
Gustavo Alva, amigo cercano de Fernández, ha expresado su descontento con la manera en que se manejó la noticia de su fallecimiento, sugiriendo que la familia pudo haber manipulado los hechos para generar un circo mediático alrededor de su velorio. Además, el escándalo que rodeó su vida private, con acusaciones de conducta inapropiada y la presión de producciones televisivas, también contribuyó a la controversia que se desató tras su muerte.
Antiguos colaboradores y videntes han insinuado que el alma de Vicente Fernández no logró “salvarse”, sugiriendo que su legado podría estar manchado por las acciones de su vida. En medio de estas teorías, algunos sostienen que el artista pudo haber optado por fingir su muerte para escapar del escrutinio público y preservar su imagen.
La familia de Fernández ha defendido su memoria, pero las preguntas sobre su verdadero estado y la manera en que se manejó su fallecimiento persisten, dejando a muchos con la inquietud de saber quién realmente “mató” al ícono de la música ranchera. La historia de Vicente Fernández, llena de éxitos y escándalos, continúa capturando la atención del público, mientras su legado sigue siendo objeto de debate.