La actriz mexicana Salma Hayek se unió a las filas de mujeres de Hollywood que acusaron al productor de cine Harvey Weinstein de conducta sexual inapropiada, al que llamó “monstruo” en un artículo publicado el martes por el New York Times.

“Durante años, él fue mi monstruo”, escribió Hayek en el artículo de opinión en el que incluyó descripciones de acoso sexual, intimidación y amenazas.

Holly Baird, portavoz de Weinstein, emitió un comunicado en su nombre el miércoles por la noche en el que refutó la versión de Hayek y calificó de inexactas sus acusaciones de conducta sexual inapropiada.

Más de 50 mujeres han afirmado que Weinstein las acosó o agredió sexualmente en las últimas tres décadas. Weinstein ha negado haber tenido relaciones sexuales sin consentimiento con nadie.

Reuters no ha podido confirmar de forma independiente ninguna de las acusaciones contra Weinstein.

La portavoz de Hayek no hizo comentarios de inmediato el miércoles.

La policía de Nueva York, Los Ángeles, Beverly Hills y Londres han dicho que están investigando acusaciones de agresión sexual o violación por parte de Weinstein.

Hayek escribió en el artículo que se sintió inspirada a compartir sus experiencias después de que otras mujeres se manifestaron. Su relato se centró principalmente en la época en que participó en la realización de la película de 2002, “Frida”, en la que interpretó a la pintora mexicana Frida Kahlo.

Hayek escribió que estaba contenta de tener la oportunidad de trabajar con Weinstein y Miramax, de la que él era dueño en ese entonces, porque era “sinónimo de calidad, sofisticación y toma de riesgos en las películas”. Pero, escribió, se encontró rechazando los avances y pedidos sexuales de Weinstein.

“No a dejar que me hiciera sexo oral”, escribió Hayek como uno de varios ejemplos. “Y con cada negativa venía la rabia maquiavélica de Harvey”.

Hayek escribió que Weinstein amenazaba con cerrar la producción de “Frida” y que la presionó para que hiciera una escena de sexo con otra mujer en la película. Hayek dijo que cuando fue a filmar la escena, “… por primera y última vez en mi carrera, tuve un colapso nervioso”.

La actriz, que llamó a Weinstein un “cinéfilo apasionado, un tomador de riesgos, un mecenas del talento en el cine, un padre amoroso y un monstruo”, escribió: “Nunca le mostré a Harvey lo aterrorizada que estaba de él”.

“Hasta que no haya igualdad en nuestra industria, con hombres y mujeres teniendo el mismo valor en cada aspecto de ella, nuestra comunidad seguirá siendo un terreno fértil para los depredadores”, escribió.

Baird emitió un comunicado en nombre de Weinstein que cuestionaba la versión de los hechos de Hayek.

“El señor Weinstein considera a Salma Hayek como una actriz de primera clase y la eligió para varias de sus películas, entre ellas ‘Once Upon a Time in Mexico’, ‘Dogma’ y ‘Studio 54’. Estaba muy orgulloso de su nominación al Oscar a Mejor Actriz por ‘Frida’ y continúa apoyando su trabajo”, decía el comunicado.

“Si bien Jennifer López estaba interesada en interpretar a Frida y en ese momento era una estrella más grande, el señor Weinstein desestimó a otros inversores para respaldar a Salma como protagonista”, decía.

El comunicado también decía que Miramax puso la mitad del dinero en una película con un presupuesto de más de 12 millones de dólares, y también señaló que hubo “fricción creativa” en la película, que dijo “sirvió para llevar el proyecto a la perfección”

. “Weinstein no recuerda haber presionado a Salma para que hiciera una escena de sexo gratuita con una coprotagonista femenina y no estuvo presente en la filmación”, dice el comunicado. “Todas las acusaciones sexuales que Salma retrata no son precisas y otros que presenciaron los hechos tienen una versión diferente de lo que sucedió”.