Nicki Heaton y Lauren Pisot acusan a Kanye West y Diddy de abuso y manipulación en la industria musical, revelando experiencias traumáticas en estudios y fiestas privadas.
Heaton relata un incidente en un estudio donde fue agredida por West y Diddy, mientras Pisot presenta una demanda por acoso y agresión en una fiesta organizada por Diddy.
Las acusaciones ponen en jaque la reputación de West y Diddy, cuestionando la complicidad y el silencio de la industria musical ante estos abusos.