Mario Cimarro, actor cubano, ha tenido una vida amorosa llena de altibajos, destacándose por su papel en “Pasión de gavilanes”.
A sus 53 años, Cimarro ha confesado que su exesposa Natalia Estrada fue el amor de su vida, a pesar de los problemas en su matrimonio.
La pareja se separó en 2001 debido a la distancia y conflictos generados por la fama, aunque se reconciliaron en 2002.
Cimarro ha mantenido varias relaciones desde su divorcio, incluyendo un compromiso con la actriz mexicana Vanessa Villela y una relación con la modelo eslovaca Bronislava Gregusova.
En 2022, Cimarro y Gregusova anunciaron que esperaban su primer hijo, y en agosto celebraron el nacimiento de su hija Brayana.
A lo largo de su carrera, Cimarro ha enfrentado controversias en el set, incluyendo acusaciones de abuso físico y conflictos con compañeros de trabajo.
A pesar de su reputación problemática, Cimarro ha intentado mostrar un lado más humano tras el nacimiento de su hija, reflexionando sobre sus emociones y dificultades.