Beatriz Adriana, reconocida como la reina de la música ranchera, revela secretos ocultos y momentos oscuros de su vida.
Desde su niñez como niña prodigio, Beatriz mostró una pasión desbordante por la música, ganando su primer salario a una edad temprana.
En 1970, Beatriz se mudó a la Ciudad de México con su madre, donde audicionó para el programa “Siempre en domingo”, alcanzando reconocimiento nacional.
La trágica muerte de su madre, a quien cuidó durante una crisis de salud, marcó un punto de inflexión en su vida y carrera.
Beatriz enfrentó el dolor de la traición y el desamor tras su separación de Marco Antonio Solís, quien tuvo un romance con otra cantante.
La tragedia más devastadora llegó en 2000, cuando su hijo Leonardo fue secuestrado y asesinado, un evento que cambió su vida para siempre.
A pesar de las tragedias, Beatriz Adriana ha demostrado resiliencia, lanzando su álbum “Amor en secreto” en 2012 y manteniendo una exitosa carrera musical.