Pepe Aguilar sorprende a su hija Ángela Aguilar con un regalo inesperado: un apartamento en Tulum.
La relación entre Pepe y Ángela había estado marcada por tensiones debido a la relación de ella con Cristian Odal.
Pepe reconoce haber sido estricto y expresa su deseo de ver a su hija feliz, pidiendo perdón por sus acciones pasadas.
Ángela y Cristian celebran el gesto de Pepe, que simboliza un nuevo comienzo en su relación familiar.
La reconciliación entre Pepe, Ángela y Cristian inspira a millones de fans, marcando un cambio positivo en la familia Aguilar.
